El corregimiento de las diecisiete villas (fotografía: Jesús Pinedo)


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EL CORREGIMIENTO DE LAS DIECISIETE VILLAS EN LA EDAD MODERNA (foto: Jesús Pinedo)
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martes, 15 de agosto de 2017

El doctor Constantino Ponce de la Fuente y sus allegados, unos zamoranos asentados en San Clemente

Francisco de la Fuente Zapata era natural de San Clemente. En una prodigiosa carrera militar había llegado a ocupar el cargo de castellano de Pavía. Ahora, poco antes de que prendiera la guerra de Mantua con los franceses, el sanclementino se dirigió al Consejo de Órdenes para la obtención de un hábito de la Orden de Santiago que reconociera sus méritos militares y su ascendencia hidalga. Hasta ciento nueve testigos fueron examinados, aunque no todos, en una sociedad tan dividida, declararon a favor de la nobleza del pretendiente.

Iglesia de San Esteban en Fuente el Carnero (Zamora), aldea de procedencia de la familia de la Fuente
No era extraño, pues aunque los de la Fuente remontaban su hidalguía a una ejecutoria de la Chancillería de Granada de 7 de diciembre de 1526 (ya en 1522 habían sido llamados a la guerra como hidalgos), la oposición que ya entonces presentó el concejo de la villa fue muy pertinaz. Los hermanos Antonio y Cristóbal de la Fuente eran hijos de inmigrantes, como tantos otros, en la sociedad sanclementina de principios del quinientos, procedentes de Zamora en un momento de renacimiento demográfico y económico de la villa. La obtención de carta de naturaleza nobiliaria iba paralela a su enriquecimiento personal, hasta cuatro mil ducados se les reconocía de patrimonio, que por supuesto, estaban interesados en evadir con su hidalguía en el pago de impuestos. No parecía dispuesto a admitirlo el concejo de San Clemente que entabló un interminable pleito de más de dos décadas hasta obtener sentencia favorable en 1547 y confirmación en 1550. Entretanto, los hermanos, celosos de su patrimonio, habían huido a Santa María del Campo (1).

La inquina que había mostrado el concejo de San Clemente por no admitir hidalgos, había desaparecido a comienzos del siglo XVII. Si en los cuarenta del siglo anterior los procuradores de San Clemente habían ido hasta Fuente el Carnero, pequeña localidad zamorana, para demostrar que los antecesores de los de la Fuente eran pecheros (tan solo un miembro de la familia, el abuelo, que había servido como criado a un hidalgo llamado Pedro Ledesma, comendador de la Orden de Santiago en la encomienda de Peñausende, parecía no darles la razón); ahora en 1629, se reconocía la existencia en Fuente el Carnero de unos fuentes ixosdalgo con poca distinción en la nobleça más que no pecharon y éstos abrá poco más o menos cien años que salieron. Pero para esa fecha la casa familiar estaba en ruinas y el último miembro de la familia había muerto hacía 34 años.

Los hermanos de la Fuente, acompañados de su madre ciega, habían llegado a San Clemente en el cambio del siglo, en torno a 1500. No eran los únicos zamoranos que habían llegado a la villa. Un tal, Francisco Fernández del Maestro, el ascendiente de los Astudillo, lo había hecho veinticinco años después, procedente de San Martín de Terroso. Es más, el primer de la Fuente, de nombre Antonio, parece que había llegado acompañando a Martín Ruiz de Villamediana, también zamorano, que fundará con el tiempo el convento de las clarisas. Los de la Fuente ya ejercían como hidalgos a comienzos del siglo XVII. Los viejos resquemores de los sanclementinos, muy vivos contra los Astudillo, habían desaparecido hacia esta familia. Tan solo un testigo de los ciento nueve se atrevió a recordar cómo la ejecutoria de Granada de 1526 había sido contradicha por sentencia posterior de 1547. Ahora los de la Fuente habían dejado de pagar las sisas de la carne, símbolo, por la vía de los hechos, de naturaleza nobiliaria en la villa de San Clemente; el padre del pretendiente, Antonio, llegó a formar parte del pequeño colegio de cuatro electores para la elección de alcalde de la hermandad, y un hermano suyo y su sobrino, avecindados en la cercana Olías, gozaban de la condición hidalga. Además la familia había ingresado de antiguo en la Cofradía de la Madre de Dios, otro modo de llamar a la cofradía de la Natividad o de Nuestra Señora de Septiembre, para la que se exigía limpieza de sangre. El abuelo Antonio de la Fuente figuraba como cofrade ya en 1531.

Menos discutible parecía el origen de los Zapata, apellido materno y de rancio abolengo. Pero en San Clemente había una total ignorancia de esta familia. A decir de los testigos, no sabían quienes eran o no querían saberlo. Sin embargo en los padrones de alcabalas de la villa de 1586 ya nos aparecen varios zapatas. En la tradición oral, la familia Zapata se asociaba a El Provencio. En la tradición de la propia familia también. Era un apellido que venía por vía materna y que ahora a fines del siglo XVI se había recuperado. Alonso Sánchez de Calatayud, señor de El Provencio, había llegado acompañado de una criada llamada Teresa Zapata, que casó con otro criado del señor llamado Fernán Martínez. Su hijo Diego Martín estableció residencia en San Clemente y su descendiente Alonso la mantuvo, a diferencia de los otros dos hijos Francisco y María que casaron en Cuenca. Una hija de Alonso, llamada Bárbara, sería la madre de nuestro pretendiente al hábito de Santiago, Francisco de la Fuente Zapata. Pero los zapatas era una familia inclasificable en San Clemente que por su insignificancia estaba rodeada de confusión. No se le conocían cargos concejiles en el pasado, el apellido ya aparecía mezclado con el de la Fuente, pero como pecheros y para colmo el nombre de Alonso Zapata, padre de Bárbara, se confundía intencionadamente por la propia familia, con otro Alonso Zapata, que ahora pasaba por bisabuelo, y que no había pagado pechos reales, aunque sí concejiles a comienzos del quinientos. Se aportaba como testimonio una copia de ejecutoria de Pedro Valenzuela en la que el tal Alonso Zapata aparecía como testigo, intitulándose hijodalgo que se dixo ser y una relación de hidalgos de 1501. En suma, ni la familia parecía acordarse de su ascendencia troncal.

Pero los méritos propios de Francisco de la Fuente Zapata, ya un anciano de alrededor de 66 años, eran apabullantes. Su carrera militar traspasaba la fama de los estrechos límites de la villa, donde nadie discutía su fama de cristiano viejo y valerosísimo soldado en Flandes. La carta de presentación de su hidalguía la hizo el comisario de la Inquisición Pedro de Cuenca, que bien procuró entroncarle con familias notorias del pueblo como los Oma, los Garnica o los Zomeño y con la familia Simón, con pedigrí de cristianos viejos por ser cofrades de Nuestra Señora de Septiembre y deudos de los Ángel, familia cuyos miembros ocupaban diversos cargos como familiares y notarios en el Santo Oficio
 sus hechos lo han dado a conocer no solo en esta villa pero en los Reynos de España y Flandes ha estado y está muy conocido, ... Francisco de Zapata Çomeño soldado que fue en Flandes y a Pedro Garnica Çapata y Antonio de Oma sus primos.
Todavía se recordaban las casas familiares de los de la Fuente, sitas enfrente de la Plaza Mayor del pueblo, aunque en  1628 eran anejas y pertenecían al convento de la Santísima Trinidad. Una muestra de ser familia principal. En ayuda del parentesco limpio de la familia vino Martín Ruiz de Villamediana, que reconocía por deudos suyos a los de la Fuente de antiguo y que habían llegado con su bisabuelo Martín, el fundador de las clarisas, a comienzos de siglo desde Tierra de Campos, lugar de procedencia de ambas familias. No era tan fácil defender la sangre noble de los Zapata, aunque en el pueblo se decía que una familiar, Catalina de Perona Zapata, guardaba ejecutoria de hidalguía, aunque la distinción parece le venía de poseer el apellido Serna, hermana como era de un capitán de guerra de la la villa con este apellido. Pero en San Clemente no había zapatas por línea varonil y difícilmente se les podía relacionar con una familia de abolengo con raíces en Iniesta y que también se había asentado en Villanueva de la Jara y las Pedroñeras. Así los testigos venían a reconocer que si algo de hidalguía existía en la sangre de las venas del pretendiente por vía materna, procedía de la abuela Catalina de Valera, que ese sí que era apellido de resonancias hidalgas y a cuyo hermano Diego se tenía por tal.

Francisco de la Fuente y Zapata había dejado San Clemente nada más alcanzada la mocedad, para ir a la guerra en busca de fortuna. Sin duda de la mano de su tío Francisco de la Fuente Zomeño, soldado en Flandes, que se hizo cargo del mozalbete que con apenas dos años de edad había quedado huérfano de su padre Antonio. Su hermano mayor de nombre Antonio, acompañado de otro hermano menor, había ido en busca de fortuna a Toledo, llevándose la ejecutoria de hidalguía familiar. Francisco, buen soldado en las guerras de Flandes, llegaría a capitán de caballos y luego de corazas, comisario general de la caballería de Milán, antes de ocupar el cargo de castellano de Pavía.

Quien mejor podía dar razón de los antecedentes familiares del pretendientes era Miguel Carrascosa, con noventa años, uno de los hombres más viejos de la villa. Su longevidad le venía de familia, su padre había fallecido con 94 años y su abuelo con cien. Aportó con su testimonio lo que en su larga vida había visto, que no era otra cosa que los de la Fuente se habían comportado como hidalgos y los Zapata como pecheros. También era muy creíble la opinión del teniente de cura Juan Bautista del Castillo, que manejaba los libros de bautismo. No le constaba que hubiera relación entre Bárbara Zapata, madre del pretendiente, y un tal Alonso Zapata, anterior en el tiempo y con fama de hidalgo. Pero el mismo teniente de cura reconocía que los libros de bautismo sólo se conservaban desde 1580 por haberse llevado los libros anteriores una riada del río Rus en 1600, custodiados como estaban en casa del mayordomo de la iglesia que vivía en el barrio de Roma. También se reconocía que la Iglesia de Santiago era la única dedicada a los bautismos, hasta que se decidió en 1612 que dos parroquias más ayudaran en este sacramento.

Sí es claro que la familia de la Fuente en todo momento intentó que pasara inadvertido uno de los miembros más insignes del linaje: el doctor Constantino de la Fuente, que a la historia ha pasado por un error  del historiador Llorente en la transcripción de su nombre latino como Constantino Ponce de la Fuente. Sabemos que nació hacia 1502 o 1505 y que murió 58 años después en Sevilla. Estudiante en Alcalá, se trasladó en 1533 a Sevilla, donde se doctoró en Teología. Su protestantismo declarado, interrumpió una carrera que le llevaba al arzobispado de Sevilla, cuando era ya canónigo magistral, abocándole a ser condenado por la Inquisición y sus huesos desenterrados para ser quemados en auto de fe en Sevilla un 22 de diciembre de 1560. Pero si la familia de la Fuente ocultaba a este hombre, su memoria pervivía en la lejana aldea zamorana de Fuente el Carnero, de donde procedía la familia. Los aldeanos apenas si se acordaban de los familiares que abandonaron la aldea allá por inicios del siglo XVI, pero recordaban la memoria de este hereje por un sermón de un monje bernardo:
que abrá quarenta años que predicando en la iglesia deste lugar un monge bernardo día de santo Tomé dixo alabando el auditorio y lugar que bien correspondía el auditorio con una persona que auía salido deste pueblo para San Clemente que se llamaua fulano de la Fuente el qual auía hecho una fuente y un carnero que auía en ella y que este tal no era persona de como quiera porque auía sido confesor y misionero del emperador Carlos Quinto
Encerrado en la prisión de Triana en agosto de 1558, se enfrentó al juicio inquisitorial hoy desaparecido y que nos impide saber si nos encontramos ante un luterano o simplemente ante un erasmista, víctima del rigor de la Inquisición por cortar de raíz los focos luteranos en España. Sabemos que ese carácter cínico que mantuvo en la duda a los inquisidores a la hora de condenar sus ideas lo llevó también al extremo en su vida personal; siendo recluido por la Inquisición no se inhibió lo más mínimo para decir aquello de quisiéranme quemar estos señores, pero me hallan muy verde. Predicador real del Emperador desde 1548, recorrió en los años sucesivos Italia, Alemania, Flandes o Inglaterra en compañía del príncipe Felipe. Gran predicador, intelectual, poliglota y autor de obras que acabaron en el Índice de libros prohibicos era ante todo un hombre de principios firmes que supo manifestar en la contestación a sus acusadores de la Inquisición: "Reconozco mi letra y, por tanto, confieso que yo he escrito todas estas cosas las cuales también manifiesto sinceramente que son verdaderas. Y no tenéis por qué esforzaros más en buscar contra mí otros testimonios: aquí tenéis ya una confesión clara y amplia de mi opinión, actuad en consecuencia y haced de mí lo que mejor os parezca.".

Se da por bueno su nacimiento en San Clemente, aunque en la fecha se difiere (¿1502 o 1505?), al igual que la de su muerte,pero no hay constatación de este hecho. Es más los datos que ahora aportamos nos llevan a creer que era uno de los hijos de aquel Antonio de la Fuente que con su madre ciega llegaron a San Clemente. A fuerza de repetirlo se ha sentenciado que el doctor Constantino era un converso, pero sus paisanos de Fuente el Carnero consideraban a la familia como cristiana vieja. Es más no se conocía de conversos en la aldea zamorana. Antonio de la Fuente llegarían a San Clemente en compañía del también zamorano (hoy diríamos vallisoletano, en cualquier caso de Tierra de Campos) Martín Ruiz de Villamediana, cuya condición de cristiano viejo nadie discutía. La afirmación de que Constantino era converso se funda en su contundente declaración contra los estatutos de pureza de sangre al ser propuesto como canónigo para la catedral de Toledo y en nada más
Respondió él, sin pararse a deliberar, que les quedaba muy agradecido por haberle juzgado digno de tanta honra, . .Pero, que los huesos de sus padres y abuelos descansaban sepultados ya hacía muchos años y que él no quería admitir ningún cargo, por ocasión del cual, se turbase aquel reposo
Para nosotros no es una afirmación que ponga en duda su limpieza de sangre, sino más bien una reafirmación de orgullo personal del derecho a los cargos por los méritos propios de cada cual.

¿Cuándo llegaron los de la Fuente a la villa de San Clemente? Desgraciadamente solo podemos hacer conjeturas. El abuelo de Antonio y Cristóbal de la Fuente fue criado, y parece que alcaide de la fortaleza de Peñausende, al servicio de Pedro de Ledesma, que era Montero Mayor del rey Enrique IV en los años finales de su reinado y comendador santiaguista de la encomienda de Peñausende a partir de 1468. Parece por los testimonios que el que llegó a San Clemente fue su hijo, y padre de Antonio y Cristóbal, de los que tenemos una primera noticia en 1522, cuando son llamados a la guerra por el señor de Valverde y Hontecillas. Cuando llegó el padre Antonio de la Fuente, no lo sabemos, pero sí que lo hizo con Martín Ruiz de Villamediana, y acompañado de otros familiares entre los que iba su madre ciega. La primera noticia que tenemos de Martín Ruiz de Villamediana en San Clemente es de 1512, cuando es de suponer que ya desde unos años antes ha entablado pleito con otros catorce nobles de la villa por su derecho a ejercer los oficios concejiles. Tanto Antonio como Cristóbal aparecen como naturales de la villa de San Clemente, es decir nacidos en el pueblo. Todo ello nos lleva a conjeturas sobre la posibilidad de que fueran hermanos mayores del doctor Constantino, nacidos en el cambio de siglo y que los de la Fuente llegaran por esta época (2). No creemos que su venida estuviera en relación con la guerra del Marquesado ni que llegaran como soldados. El detalle de llegar con una madre inválida a cuestas nos hace pensar así. En las propias informaciones de testigos pedidas por la villa de San Clemente hacia 1547 se nos dice que eran pecheros cuando llegaron a la villa y que solamente al abuelo se le conocía un servicio a favor del citado comendador Pedro de Ledesma, que le permitió dejar de pechar en su aldea.

Las informaciones de testigos nos aportan datos vagos. El testimonio de Martín Ruiz de Villamediana afirmaba que
el bisagüelo que se llamó Antonio de la Fuente el qual vino a esta villa a biuir con el bisagüelo deste testigo que se llamaua Martín Ruiz de Villamediana y esto consta por la executoria que tiene este testigo (del año 1513) ... y a oído decir que eran algo deudos y que el dicho Antonio de la Fuente uino de Tierra de Campos de la uilla de Tiedra Tor de Humos y Zamora (las villas de Tiedra y Tordehumos, actualmente en Valladolid)
Martín Ruiz de Villamediana posiblemente se estaba refiriendo a la localidad origen de su bisabuelo. Los testimonios dados por los naturales de Fuente el Carnero jugaban más con el recuerdo de sus antepasados que con datos fidedignos. Sí tenían reciente el sermón del monje bernardo, que se refirió a un de la Fuente que había llegado a ser confesor del Emperador, pero nadie estaba interesado en rescatar a estas alturas la memoria del doctor Constantino de la Fuente, condenado por la Inquisición; ni el pueblo, con fama de limpio, ni un pretendiente al hábito de Santiago.

Los aldeanos de Fuente el Carnero tenían reciente también en la memoria la relación de un clérigo llamado Francisco del Pozo, muerto a los 94 años, que decía que antaño hubo unos de la Fuente al servicio de Pedro Ledesma y que se fueron de la aldea llevándose a su madre ciega. La relación que hace mención indirecta al doctor Constantino de la Fuente viene dada por dos testigos. Uno de ellos ya referido y otro llamado Martín de Tébar el viejo, que nos dice
que oió a un fraile bernardo que no sabe si murió predicando en esta aldea en la iglesia della que auía salido deste lugar gente mui honrrada y particularmente un fulano de la Fuente, un descendiente del qual estuvo para ser arçobispo de Seuilla
La salida de los de la Fuente viene relatada así por un aldeano de Fuente el Carnero
que de aquí abían salido unos Fuentes y que llebaron una madre ciega que tenían y que los dichos Fuentes sirbieron a unos caballeros Ledesmas que tenían aquí casa y los dichos Fuentes también cerca de la de los dichos señores Ledesmas, los quales se serbían de jente hijadalgo y así se serbieron de los dichos Fuentes los quales se fueron a bibir hacia la Mancha y fueron con un fulano Ruiz de Billamediana y se quedaron por allá
Hoy solo hemos pretendido hacer una aproximación a este linaje de los de la Fuente, que, procedentes de Zamora, dieron a la villa de San Clemente dos de sus hijos más ilustres: el soldado Francisco de la Fuente Zapata y el predicador doctor Constantino de la Fuente. Esta última figura es la más señera y la más atrayente,  si es hereje, gran hereje será, había dicho de él Carlos V desde su retiro de Yuste. A pesar de que don Marcelino Menéndez Pelayo denunciará la tierra de Cuenca como tierra fecunda de herejes, iluminados, fanáticos y extravagantes personajes de todo género, hoy la olvidada historia de esta tierra echa de menos a estos hombres singulares y atrevidos que proyectaron el nombre de Cuenca en el orbe universal.



(1) TORRENTE PÉREZ, Diego: Documentos para la historia de San Clemente. Tomo II. 1975, p. 73
(2) En 1501 nos aparece un Pedro de la Fuente, vecino de San Clemente, y nombrado como escribano del número de la villa.RGS, LEG, 150111, 27


ANEXO I.- Testigos presentados en las pruebas para la obtención del hábito de Santiago, del 27 de diciembre de 1628 al 28 de enero de 1629

Pedro de Cuenca, comisario del Santo Oficio, 54 años
Ginés de Llanos Peralta, alférez, 64 años
Don Miguel de Ortega, 60 años
Martín Ruiz de Villamediana, 69 años
Cristóbal de Zaragoza Carrasco, 84 años
Antonio Martínez de Tébar, 78 años
Antón López Cruzado, 80 años
Cristóbal Galindo de Olivares, 70 años
Don Bautista Alarcón Fajardo, 48 años
Capitán don Pedro de Valenzuela, 56 años
Cristóbal Ángel Olivares, 59 años
Melchor Rodríguez Fructuoso, 82 años
Bautista Montoya de los Herreros, 62 años
Pedro González de Córdoba, 70 años
Doctor Jerónimo de Mendiola Iturmendi, vecino de San Clemente y natural de Santa María del Campo Rus, sesenta y ocho años. Reconoce que su familia tenía un gran patrimonio en San Clemente.
Miguel Carrascosa, 90 años.
Licenciado Pedro de Perona, clérigo. 70 años.
Francisco González, 73 años
Antonio Martínez Ángel, 60 años.
Alonso Sánchez Simón.
Juan González de Garnica, escribano, 65 años.
Catalina de Perona Zapata, 74 años.
Andrés López Tribaldos, 81 años.
Cristóbal de la Fuente, sobrino del pretendiente Francisco de la Fuente Zapata, natural de San Clemente y vecino de Olías.
Juan de Perona Simón.
Cristóbal de Olivares Simón, 76 años.
Bautista García de Peralta, 60 años.
Sancho López de los Herreros, 62 años.
Don Miguel de los Herreros, 70 años.
Pedro de Perona Granero.
Luis Redondo Dávalos, 64 años.
Baltasar Rodríguez, 70 años.
Miguel López de Perona, 70 años.
Domingo de Ramos, 66 años.
Pascual Simón.
Francisca Martínez, más de 60 años.
Francisco López de Garcilópez, 77 años.
Bachiller Hernán López del Campillo, 66 años.
Pascual Pérez de Lerín, familiar del Santo Oficio, 56 años.
Juan Baptista del Castillo, teniente de cura de la Iglesia parroquial, 66 años.
Juan de Comarcada, 70 años.
Ginés del Campillo Juera, 53 años.
Rodrigo González, 83 años.
Francisco de Llamas, 80 años.
Bartolomé de Celada, 54 años.
Juan de Villanueva, clérigo, 46 años.
Juan Zapata, de 25 años, hijo de Juan Zapata y de doña Antonia de Palacios; sus abuelos paternos eran el licenciado Fuente Zapata y doña Ángela de Llanos y sus abuelos maternos Antón García Moreno y no se acuerda de la abuela. Manifiesta parentesco con la madre del pretendiente pero no aporta papeles.
Francisco de Manzanares, 66 años.
Francisco de Vargas, 75 años.
Licenciado Diego de Robles, clérigo, 63 años.
Felipe Ruiz de Arce, 52 años.
Entre el 18 y el 21 de enero de 1629 se examinan 24 testigos ancianos, cuyos nombres no aparecen. El 27 y el 28 de enero otros 10 ancianos como testigos.
El resto de testigos presentados son de Fuente del Carnero en Zamora.

ANEXO II.- Documentos sobre la hidalguía de Zapata y de la Fuente en el Archivo de San Clemente (ya desaparecidos en su mayor parte)

Las elecciones que aportamos además de mostrar la condición hidalga o pechera de los hermanos de la Fuente, detallan la primera elección de oficios a mitad entre pecheros e hidalgos por primera vez el 29 de septiembre de 1536 y el establecimiento de un nuevo modo de proceder a la elección de dichos oficios concejiles desde septiembre de 1549, según ejecutoria del emperador Carlos V

Año 1501: este dicho sábado ix de otubre i(mil)di años los dichos señores del ayuntamiento mandaron que por quanto aquí en esta dicha villa ay algunas personas que se escusan por fixosdalgo esentos lo qual no tienen probado e si algunos dellos pueden gozar de las tales libertades será en los pechos rreales e no en los gastos de el conzejo por nuevamente libertados por ende que se nombren aquí todos los que de tal calidad son e los ponga los rregidores que aora son por ante su escriuano en el libro de la partida e de sus rrepartimientos los quales son los siguientes = y fueron señalados quinze personas y entre ellos ay un nombre que dize= Alonso de Çapata

Año 1536: a los veinte y nueve de setiembre de mill y quinientos y treinta y seis años la dicha justiçia y rregimiento se juntó a hazer eleczión de los ofizios de alcaldes hordinarios e alguazil y rregidores mayor que en aquel tiempo se nombraban= y por el corregidor que a la sazón era les fue propuesto nombrassen hijosdalgo a quien dar la mitad de los ofizios y los dichos ofiziales no vinieron en ello diziendo estaban en costumbre los tuviesen los buenos hombres pecheros por cuya causa el dicho corregidor mandó traer ante sí el libro de rrepartimiento de alcabala donde dixo estar escripto los hijosdalgo y por tales sacó y hizo poner en  la dicha eleczión diez y seis personas por el dicho estado y entre ellos aun hombre que se dize Antonio de la Fuente.

Año 1549: en virtud de la executoria de su magestad pareze se dio nueva forma a la dicha eleczión (para el 29 de septiembre) mandándose nombrase para los dichos ofizios  de alcaldes ordinarios y alguazil mayor diez y seis personas, las quatro de los hijosdalgo y los otro doze pecheros y que entre todos diez y seis se hechase en suertes para los dichos ofizios y en esta conformidad fue hecho el dicho nombramiento en el qual por el estado de los hijosdalgo pareze ay un nombre que dize= Antonio de la Fuente

Las sucesivas elecciones que aparecen después, a partir del año 1553, los de la Fuente ya aparecen en todas ellas como pecheros.

ANEXO III: Los hermanos Antonio y Cristóbal de la Fuente son llamados a la guerra como hijosdalgo. 1522

Yo George Rruyz de Alarcón, señor de las villas de Valverde e Hontezillas, capitán de toda la gente de cavallo e de pie de todo el Marquesado de Villena por sus magestades etc, digo por la presente que por quanto Antonio de la Fuente e Christóval de la Fuente su hermano veçinos de la villa de Sant Clemente fijosdealgo fueron señalados pareçer con sus armas e cavallos en seruiçio de sus magestades en el exérçito que yo por su mandado lievo deste dicho marquesado sobre las civdad de Xátiva e villa de Alzira a las rreduzir e a llamar en su seruiçio e me los do el conçejo de la dicha villa e partieron della con mi capitán e dieron al capitán Capitán Granada que en su nonbre e lugar vaya e sirvan en esta jornada e yo soy contento por sí persona tal pareçiendo que les libro al dicho camino e mandó que los ayan por bien seruido e no molesten sobre ello, fecho en Sant Clemente a xxiiii de setienbre de i(mil)dxxii años

ANEXO IV: los de la Fuente como cofrades de Nuestra Señora de Septiembre

Yo Diego de Llanos escribano por el rrey nuestro señor y público del número de la villa de san clemente i ayuntamiento della certifico que oy ago fee a los señores que este vieren como ayer trece del presente juntamente con pablo de cuenca vezino y rregidor perpetuo vecino desta dicha villa, mayordomo de la cofradía de nuestra señora de la conzepción y natividad della y con el licenciado pedro de cuenca comisario del santo oficio de la Inquisición de cuenca en esta dicha villa y christóual ángel oliuares notario del dicho santo ofizio cofrades de la dicha cofradía fuimos al colexio de la compañía de jesús desta villa donde tiene sus archivos el dicho cavildo y cofradía haviendo havierto las llaues dellos con asistenzia de los señores don fernando rruiz de alarcón cauallero de la horden de santiago señor de las villas de santa maría del campo valera de arriua la torre i paxarilla i el lizenciado don francisco de la rrocha presvítero de la horden de santiago conventual en su convento de la ziudad de león rresidentes en esta villa por su mandado se vieron los libros de la dicha cofradía donde están escriptos y sentados los cofrades antiguos della particularmente el del año de mil y quinientos y treinta y uno y en cada uno dellos se hallaron de los nombres y apellidos = de fuente = simón y valera = rrecividas por cofrades las personas siguientes

libro de nuestra señora de la conzepción y natividad de septiembre que comenzó en el año de mil y quinientos y treinta y un años = antonio de la fuente = jorxe simón = diego simón el viexo = diego de valera = francisco de la fuente = franzisco simón = antonio de la fuente =

matrícula de los cofrades vibos pasados del libro más viexo que éste en el año de mil quinientos y sesenta años
= antonio de la fuente simón = diego simón el viejo = diego de valera = francisco de la fuente pallares = francisco de la fuente comeño = el lizenciado antonio de la fuente sin pitanza por ser letrado de cavildo =

los quales dichos nombres de los dichos cofrades están escritos y sentados en los dichos libros en diferentes foxas ... y doy fee que la dicha cofradía está fundada baxo el estatuto de limpieza y que para rrezivir los cofrades della se hazían por mandado de los ofiziales de la dicha cofradía informaziones de limpieza como pareze de muchas dellas que están en el dicho archivo


ANEXO V.- Genealogía de la familia de la Fuente

Pretendiente al hábito de Santiago

Francisco de la Fuente Zapata, castellano de Pavía, natural de San Clemente. Nacido hacia 1560

Padres

Antonio de la Fuente Simón y Bárbara Zapata, naturales y vecinos de San Clemente

Abuelos paternos

Antonio de la Fuente y María Simón, hermana de Jorge Simón, vecinos y naturales de San Clemente

Abuelos maternos

Mauricio Zapata y Catalina de Valera, hermana de Diego de Valera, vecinos y naturales de San Clemente

Bisabuelo paterno

Antonio de la Fuente, vecino de San Clemente y originario de Fuente del Carnero, aldea a tres leguas de la ciudad de Zamora

Bisabuelo Materno

Alonso de Zapata, vecino y natural de San Clemente (genealogía dudosa, presentada por Cristóbal de la Fuente, sobrino del pretendiente)



Archivo Histórico Nacional,OM-CABALLEROS_SANTIAGO, Exp. 3178 Fuente y Zapata, Francisco de la. 1629